
Que envidia me da cuando en las películas va uno con un ordenador portátil, y con un par de comandos, se conecta al ordenador central de donde sea: una torre de oficinas donde tiene el control de todo el sistema incluyendo cámaras, servidores, teléfonos y ascensores, o bien se conecta via satélite con cualquier sistema de misiles... y todo eso con dos o tres instrucciones, y todo compatible y le funciona de maravilla. Además no tienen nunca problemas de comunicación, todo es compatible y además en un abrir y cerrar de ojos.
A mi me ha costado días poder conectar y hacer que funcionen a pleno rendimiento tres ordenadores que tengo en red en habitaciones distintas y aun tengo problemas para crear usuarios nuevos, porque la maquina me dice no se que, de que no puede encontrar el perfil y que mire la red.
Me tomaré un descanso y mientras buscaré a algún director de cine pero de esos de altavoz de embudo, que esté subido en esa especie de asiento al estilo de arbitro de tenis, arengando al cámara para que no deje de darle a la manivela.
A mi me ha costado días poder conectar y hacer que funcionen a pleno rendimiento tres ordenadores que tengo en red en habitaciones distintas y aun tengo problemas para crear usuarios nuevos, porque la maquina me dice no se que, de que no puede encontrar el perfil y que mire la red.
Me tomaré un descanso y mientras buscaré a algún director de cine pero de esos de altavoz de embudo, que esté subido en esa especie de asiento al estilo de arbitro de tenis, arengando al cámara para que no deje de darle a la manivela.
Jajajaajaaj, es k tu vives en la realidad y las en las pelis, existe un guión escrito donde te dicen k tecla pulsar para k todo se conecte y funcione ficticiamente. Buena observación esa ehh... ánimo k tu tb puedes ¡¡¡
ResponderEliminar...no deje de darle a la manivela."
ResponderEliminar¡Acción!
El encuadre es perfecto: seguro de ti mismo, al volante de un descapotable de la época, la gorra de cuadros ligeramente ladeada. Con un decorado móvil recreando la Riviera Francesa y un gran ventilador en marcha, ondeando coquetamente el pañuelo que la chica de la peli lleva para sujetarse el pelo. Sin olvidar, por supuesto, los dos ayudantes agazapados en la trasera del auto, traqueteando suavemente el lujoso coche que nos condurcirá a Saint Tropez, mon amour!!